Recientemente en un mensaje en
una de las redes sociales que uso, alguien que se identifica con el Chavismo me
escribía que ya muerto Chávez, de qué iba a hablar porque no tenía ningún otro
argumento.
Es cierto que cada una de las
columnas que he escrito en el último año, han descrito y criticado con
severidad el gobierno del ya fallecido Comandante Presidente, con argumentos
bien sólidos, donde nadie podía negar el alto índice de homicidios ocurridos en
toda la nación venezolana, la inflación, la escases de alimentos, las fallas
cada vez más crecientes de energía eléctrica, entre muchos otros males que una
nación con un ingreso petrolero tan exorbitante no debería sufrir.
También es cierto que yo misma le
otorgaba al ya fallecido presidente la responsabilidad máxima de todos estos
fracasos, a lo que muchos de sus
seguidores, golpe de pecho de por medio y con fe ciega a lo que su comandante
les decía, traspasaban esta responsabilidad a sus ministros, a sus tren
ejecutivo, directores, secretarios y cualquier otro personaje vinculado a la
labor que se debían llevar a cabo y que no resultaba según las promesas.
Ahora luego de 100 días de
“gobierno” de Maduro, ahora que ya el Comandante no está entre los vivos, los
que quedan son solo aquellos aprovechados y fieles a su entorno, los que
siempre han estado ahí, porque no ha habido mayores cambios de personajes, solo
de cargos o puestos o responsabilidades, pero siempre la misma cúpula ha
gobernado al lado de él, siendo co-responsables de todos los fracasos.
También leí por ahí virtudes
atribuidas como ideas mágicas e innovadores, las que se otorgan a las misiones
de alfabetización o de vivienda. Conversaba con mis hijos que no superan los 30
años de edad sobre esto y por supuesto, siendo tan pequeños hace 20, no tienen
memoria de los avances de aquel programa tan hermoso como fue ACUDE , para la
alfabetización de adultos, o la gran influencia que tuvo en darle viviendas
sanas y decentes a los más necesitados y
a los campesinos como lo hizo el programa de Malariología, para con esto
también erradicar la grave enfermedad junto a otros programas de saneamiento, ( ¿les comenté que ha vuelto la malaria en
estos últimos años?) .
Un país como Venezuela, con tan
importantes ingresos económicos no debía estar pasando todavía por escases de
vivienda, de comida, de electricidad de divisas. Un país con tan exorbitante
ingreso se vanagloria de reducir la pobreza con números amañados o el desempleo
con trabajo informal, luego de 14 años de un gobierno que prometió soluciones
instantáneas (cosa que tampoco se creía y que como tal no pasó), una país así
no debería tener repuntes de malaria, mal de chagas , sarampión y otras que ya
habían sido contraladas por el sistema sanitario nacional.
Es ese mismo país que estuvo
gobernado por una figura reconocidamente atrayente pero que ahora deja como sucesión
a aquellos que su propia gente criticó por ineficientes. A personajes sin el atractivo
carismático del Hugo Chávez.
Queda un país dividido, dirigido por los que durante meses
le mintieron a los suyos y a todo el mundo asegurando que su líder se
recuperaba, que firmaba decretos, que ordenaba en materia económica, que leía
los periódicos para enterarse del acontecer nacional (en el diario oficial
cubano)
A mis compatriotas que ahora enfrentaremos
una nueva contienda electoral el próximos 14 de abril, acudan a las urnas, no
dejemos que quienes se quieran aferrar al poder, quienes mintieron tan
descaradamente sigan aprovechándose del carisma de su líder, que ahora quedará
en la memoria de la historia y está lo juzgará. Porque maduro no es Chávez y
los hijos nunca son iguales a sus padres.
@PilinLeon
1 comentarios:
feleiciataciones, asi es que se decen las verdades sin caer en atropellos y sin ofensas, solo asi se construye un pais informandolo del acontecer y de lo que esta pasando, saludos. @Gregorio Chinchilla
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